Los Verracos

Toros y cerdos

Esculturas

Los llamados “verracos” son las típicas esculturas de granito del occidente de la Península Ibérica que representan toros y cerdos. Su distribución coincide en gran parte con el territorio de los vettones. Están tallados en bloques donde se representa al animal de cuerpo entero, así como el pedestal que lo sustenta. Sus dimensiones no son uniformes, ya que hay ejemplares de menos de 1 m y esculturas de más de 2,5 m de longitud.

Más de 400

Se conocen más de 400 esculturas, de las que casi la mitad procede de la provincia de Ávila, siendo la capital la que concentra el mayor número de ejemplares y los Toros de Guisando (El Tiemblo) el conjunto más conocido. En la Segunda Edad del Hierro su significado parece estar relacionado con la protección de los poblados y del ganado y con la demarcación de zonas de pasto. Unas pocas fueron reutilizadas durante la época romana siendo colocadas encima de tumbas de incineración.

Esculpido en granito

Detalle Verraco

Típicas esculturas de granito del occidente de la Península Ibérica que representan toros y cerdos

Solosancho y Villaviciosa

De las inmediaciones de Ulaca proceden dos ejemplares de toro esculpidos en granito. El más espectacular yacía junto a un manantial en el lugar conocido como “Fuente del Oso”, en la ladera norte del oppidum. En la actualidad se conserva junto a la iglesia de Solosancho. Se trata de un ejemplar de grandes dimensiones (más de 2 m de longitud) al que le falta el hocico y las extremidades se advierten rotas por encima de las rodillas. En la nalga derecha presenta un grabado en zig-zag. El otro ejemplar también procede de los alrededores de Ulaca, aunque se desconoce su origen exacto. La escultura (de 1,6 m de longitud) carece de cabeza y las extremidades están rotas por debajo de las rodillas. Actualmente se conserva junto al castillo de Villaviciosa.